¿Tu shampoo te está haciendo perder el cabello? Descubre el impacto real de sulfatos y siliconas
¿Por qué se habla tanto de los sulfatos en los productos capilares?
Los sulfatos, como el Sodium Lauryl Sulfate (SLS), son agentes limpiadores potentes que producen esa espuma que muchas personas relacionan con limpieza. Sin embargo, también pueden ser demasiado agresivos: eliminan no solo la suciedad, sino también los aceites naturales del cuero cabelludo, lo que puede provocar resequedad, irritación y con el uso prolongado, debilitar los folículos capilares.
¿Los sulfatos causan caída del cabello?
Indirectamente, sí. Un cuero cabelludo constantemente seco o inflamado se vuelve un entorno hostil para el crecimiento saludable del cabello. Aunque no “arrancan” el cabello, los sulfatos pueden acelerar la caída en personas con predisposición o problemas de cuero cabelludo, como dermatitis seborreica o sensibilidad cutánea.
¿Y qué hay de las siliconas? ¿Son malas?
Las siliconas como el dimethicone recubren el cabello y le dan un acabado suave y brillante… al principio. El problema es que muchas son no solubles en agua, lo que significa que se acumulan con el tiempo, formando una capa que impide que otros productos penetren, y que puede asfixiar el cabello. Esto puede dejarlo pesado, opaco y con apariencia de “limpio pero sin vida”.
¿Cómo saber si un shampoo me está haciendo daño?
Observa si después de varias semanas de uso notas lo siguiente:
- Picazón persistente en el cuero cabelludo.
- Caída de cabello más notoria durante el lavado o al peinarte.
- Cabello más quebradizo, opaco o con frizz constante.
- Necesidad de lavar el cabello cada vez más seguido.
¿Qué ingredientes debería evitar si tengo cuero cabelludo sensible o cabello fino?
- Sulfatos fuertes: como SLS o SLES.
- Siliconas no solubles: como dimethicone o cyclopentasiloxane.
- Fragancias sintéticas: pueden ser irritantes y ocultar ingredientes dañinos.
¿Entonces qué debo buscar en un buen shampoo?
Opta por fórmulas que digan “libre de sulfatos y siliconas”, o que utilicen tensioactivos suaves como Coco-Glucoside o Sodium Cocoyl Isethionate. También es buena señal si contienen ingredientes calmantes como aloe vera, extracto de manzanilla, o aceite de jojoba.
¿Necesito cambiar todo mi sistema capilar?
No necesariamente, pero sí es importante hacer una limpieza profunda ocasional con exfoliantes capilares o shampoos clarificantes suaves (sin sulfatos), y mantener una rutina que alimente tanto el cabello como el cuero cabelludo.
Cómo identificar sulfatos y siliconas en tu shampoo
1. Lee la lista de ingredientes (INCI)
En los envases siempre hay una sección llamada “Ingredients” o “Ingredientes”. Los ingredientes se listan de mayor a menor concentración, así que los primeros son los más abundantes.
2. Ingredientes que indican presencia de SULFATOS
Evita shampoos que incluyan los siguientes nombres (sobre todo en los primeros 5 ingredientes):
- Sodium Lauryl Sulfate (SLS)
- Sodium Laureth Sulfate (SLES)
- Ammonium Lauryl Sulfate
- TEA-Lauryl Sulfate
- Sodium Myreth Sulfate
Pista: cualquier ingrediente que termine en “sulfate” es un tipo de sulfato.
3. Ingredientes que indican presencia de SILICONAS
Busca estas palabras clave, generalmente terminan en -cone, -conol, -xane o -siloxane:
- Dimethicone
- Cyclopentasiloxane
- Amodimethicone
- Trimethicone
- Cyclohexasiloxane
- Phenyl Trimethicone
Tip: si ves “PEG-” seguido de algún número y -dimethicone, es una silicona modificada para ser soluble, pero aún así puede generar acumulación con el tiempo.
4. Ingredientes seguros o alternativos suaves
Si buscas opciones más gentiles para el cuero cabelludo, identifica estos nombres:
- Coco-Glucoside
- Decyl Glucoside
- Sodium Cocoyl Isethionate
- Disodium Laureth Sulfosuccinate
- Lauryl Glucoside
Estos tensioactivos limpian sin resecar ni irritar.
5. ¿Y si no entiendo nada? Usa apps o escáneres
Herramientas como INCI Beauty, Yuka, Think Dirty o CosDNA te permiten escanear el código de barras del producto y te muestran si es seguro o no, explicando cada ingrediente.
Publicaciones: Efectos de los Sulfatos en la Salud del Cabello
Un artículo publicado en Skin Appendage Disorders destaca que los surfactantes aniónicos, como el Sodium Lauryl Sulfate (SLS) y el Sodium Laureth Sulfate (SLES), son agentes de limpieza potentes pero agresivos. Estos ingredientes pueden eliminar los lípidos naturales del cabello y del cuero cabelludo, lo que lleva a una mayor fragilidad, sequedad y frizz. Además, su uso frecuente puede causar inflamación en los folículos pilosos, contribuyendo a la pérdida de cabello, especialmente en personas con cabello tratado químicamente o texturas más frágiles.